* Soy un asesor de rendimiento que lo mismo ayuda a un campeón olímpico que a una persona sin páncreas. Por si necesitas unas credenciales mínimas, me han dado un título de fisio y otro de dietista y no he pasado el psicotécnico, ellos sabrán.
Si estás buscando cosas sobre alimentación y rendimiento deportivo, esto te interesa.
Porque,
TODO EL MUNDO QUIERE RENDIR MEJOR PERO SE COMPLICA DEMASIADO LA VIDA.
Aprende trucos de deportistas top, que puedas encajar en tu día a día.
"Hablemos claro, nadie quiere comer bien, ni entrenar bien, ni dormir bien. Lo que queremos son las soluciones que nos ayuden a pillar esa ola que nos hace sentir superhéroes. Cuando estás en forma piensas mejor, curras mejor y hasta el sexo es mejor. Hay mucho yonqui que lo necesita, y para eso 2 donuts de chocolate pueden funcionar mejor que un plato de pasta y el suero de las diarreas mejor que la bebida mas sofisticada".
Descárgate mi ebook "Conversaciones, serias, entre un dietista y un ingeniero". Te cuento estos y otros muchos aprendizajes.
Suscríbete al newsletter y recibe gratis el ebook "Conversaciones, serias, entre un dietista y un ingeniero".
Todos queremos rendir mejor.
Yo también.
Y para eso he aprendido que no hay que hacer lo que parece que hay que hacer. Hay que hacer lo que funciona.
"A mí lo de comer bien me hace mucha gracia. Todo el mundo quiere hacerlo y casi nadie lo consigue."
Esto es DESEQUILIBRADOS: un newsletter desafiante dónde te cuento, cómo nadie cuenta, trucos sobre alimentación y rendimiento deportivo.
Te puedes inscribir aquí:
Recibe gratis el boletín diario de Juan Martínez, basado en hechos reales.
Nota: Para escuchar las mismas cosas, contadas de la misma forma, no entres. Apuntarse es gratis y salir también.
Te mando un email diario los próximos 365 días con un consejo útil y realista sobre alimentación y rendimiento deportivo.
Un año sí, más no sé.
Que la vida da muchas vueltas.
Puede que me llamen para currar con la selección brasileña de sexo en pelotas y me pidan exclusividad.
Y aunque a estos les diría que no,
que vivo feliz en pareja y soy el único coach de rendimiento realmente fiel en la faz de la tierra,
la vida da muchas vueltas.
Un año sí, más no sé.
Así que aprovecha.
Empieza el 2 de Octubre del 23 y no sé si acaba el 2 de Octubre del 24.
Día que no estás, perla que no tendrás.
Nada mas entrar tienes un suculento regalo: EL ebook "Conversaciones, serias, entre un dietista y un ingeniero".
La recopilación del primer mes y medio de emails de este newsletter.
Te enterarás de primera mano de que va esto y obtendrás más información de la que yo he obtenido en la universidad, instagram y la wikipedia juntas.
Sólo me comprometo con lo que sé que voy a cumplir.
Todos los días te mandaré un consejo útil y realista, no de los libros, de los que se pueden implementar.
Sobre alimentación,
pero también sobre
entrenos,
respiración,
lesiones,
sueño,
el coco...
De las cosas a las que me dedico vaya, soluciones y trucos que he usado y uso con mis deportistas.
Y un poco de lo que me vaya dando la gana claro, que para eso es mi Newsletter.
Pero 1 mail al día durante un año es mucho curro, ¿porque lo hago?
Me gustaría decirte que me sale del corazón, que quiero contribuir a crear un mundo mejor lleno de gente inspirada creando un recurso que de forma divertida enganche a la gente a mantenerse conectada con lo que realmente quieren conseguir, cosa esencial si quieren ser constantes. Ayudándoles a rendir mejor en aquello en lo que anden metidos, con recursos útiles y aplicables.
Ya pero,
Al final de cada email puede que te pegue un link a alguna de mis formaciones de pago.
Un link inerte como la droga, que si no haces click no te salta a la cara, ni te insulta ni te pega.
El que ve interesante una formación la hace y recibe un valor siempre muy superior al precio que va a pagar.
El que no, sigue recibiendo los emails gratuitos todos los días y estupendamente.
Nuestra relación no va a cambiar por eso, te voy a seguir queriendo igual.
Pero seguro que va mejor si nos hablamos claro desde el principio.
Ok,
Ahora sería el momento de ponerte un montón de reseñas de esas que te ponen por las nubes, sólo esas claro, pero no lo voy a hacer.
Te he dicho que para hacer las mismas cosas que todo el mundo paso,
y la intimidad de la gente con la que trabajo es prioritaria.
Tu crees que si trabajo con Guardiola le voy a decir, "vamos Pep, hazme una reseña meu..."
Seamos serios.
Ya sabes, valgo más por lo que callo.
Nota aclaratoria: Aunque te vaya a contar intimidades que puedan salpicar a alguna persona, siempre lo haré de tal manera que nunca puedas saber quién es.
Es sencillo, si lo que estás viendo no te genera cosquillitas en el estómago, ésta relación no es para ti.
A cambio, te cuento una primera historia.
Así podrás ir haciéndote una idea de lo que te vas a encontrar dentro:
(Si ya estás convencid@ y nuestra relación te genera cosquillitas en el estómago, te puedes inscribir aquí, sino sigue leyendo:)
Recibe gratis el boletín diario de Juan Martínez, basado en hechos reales.
La historia
* Una cosa te digo antes de empezar, si consideras que la alimentación deportiva no es para ti, tienes un grave problema.
Verás, sigue leyendo hasta el final.
Sensación térmica 35 bajo 0.
Temperatura real -17º.
Y hay una ventisca de la ostia con "H" mayúscula.
Llevábamos 2 días enteros dentro de una tienda de campaña, y yo ya estaba hasta los huevos de mear dentro de un bote.
Lo de días enteros es literal porque donde estamos no existe la noche en esa época del año.
Osea, 2 días literales enteros dentro de una tienda de campaña, que se movía mas que una gelatina en un terremoto, meando dentro de una bote.
Ella, la jefa, la verdadera expedicionaria, que yo era sólo un compañero circunstancial, lo llevaba incluso peor que yo. Es dura como una roca, pero lo de las ventiscas "le revienta la cabeza".
Pero Juan, aver, porqué no sales de la tienda y dejas de mear en un bote?
Pues joder, porque sacar la churra a 35 bajo 0 con una ventisca de la ostia con "H" mayúscula, no es la mejor opción.
Ella, la jefa, la verdadera expedicionaria ya me lo había avisado: "a determinadas temperaturas todo bajo protección".
Y no estoy hablando de sexo.
Hablo de las manos, mínimo guantes finos por debajo de los gordos y dependiendo, incluso una capa más. Pero sacarse los guantes finos, sobretodo con ventisca, NO.
Entonces,
salir del confort de tu saco,
bajarse el pantalón de tirantes,
el panty interior,
los gallumbos,
mínimo con guantes finos,
con la chorra al aire lo que dure la meada tras aguantar es pis toda una noche que no existe,
durante una ventisca de la ostia con "H" mayúscula...
aumenta mucho las probabilidades de mearse en los zapatos.
Aceptar alguna congelación, vale. Mearse en los zapatos, NO.
Mejor mear en un bote.
No hablo de una ventisca normal, hablo de una ventisca de la ostia con "H" mayúscula.
De esas que mientras duermes te pueden enterrar en la tienda.
Riesgos de andar atravesando Groenlandia:
1.- Que una ventisca de la ostia te entierre mientras duermes en una noche que no existe.
. 2.- Los osos polares.
. 3.- Que te quedes incomunicado porque se te ha jodido el panel solar con el que cargas el teléfono satélite, el organizador del evento te entregue una baliza de rescate con las pilas caducadas y calcules mal la comida para llegar a las coordenadas de recogida o no llegues a tiempo, mientras los que te están buscando no encuentren una aguja en un pajar, que es lo que tu eres en ese momento.
Resultado: muerte cómica con cara de gilipollas.
Nota: la tercera opción también es verídica, menos lo de la muerte cómica con cara de gilipollas.
Si quieres enterarte de como escapamos de una muerte cómica te lo cuento dentro.
Te puedes inscribir aquí:
Recibe gratis el boletín diario de Juan Martínez, basado en hechos reales.
Pues bien, ya estamos en situación.
Estamos viviendo literalmente en un congelador.
No en una nevera en donde poder pillar toda la comida que quieras. En un congelador con las ventanas abiertas.
Me vas pillando?
Vivir en un congelador tiene algún que otro inconveniente además de mearte en los zapatos.
Tienes que llevarte a cuestas toda la comida que necesitas, durante los 30 días de penitencia.
Y la pulka pesa, en mi caso 105 kg al salir. Le destrocé los brancales a base de tirones para superar los puñeteros sartruguis.
(Nota tranquilizadora: si no te has enterado de nada de las últimas líneas no estás sólo, es un jerga exclusiva para expedicionarios de travesías polares, y sus acompañantes circunstanciales. Es irrelevante para lo que te interesa.)
Y tienes que decidir mínimamente bien.
Vivir en un congelador también es una clase de física que suspendimos en algunas cosas.
Como a la hora de calcular el punto de congelación de las grasas.
Se nos ocurrió llevar una buena garrafa de 5 litros de saludable aceite de oliva.
El carajo es que estaba congelado todo el put* día. Y calentarlo para cada comida con combustible de avión... un cristo.
Por el contrario, el anticongelante de los peces- por si acabas de aterrizar en el planeta eso es el omega 3-, estuvo líquido hasta el final.
Decisiones saludables de muy difícil aplicación.
Algunos llevaban salchichón y chorizo...
Y no te digo nada para lo mas esencial en la alimentación: beber.
Es una gran paradoja, porque vives en una tremenda abundancia de agua que en su estado sólido no te sirve para nada.
Salvo que seas uno de esos pijos americanos que ponen hielo de Groenlandia en los cubatas, porque al contener muchas burbujas de aire, hace un ruido super chick.
El caso,
descongelar agua dentro de un congelador es una contradicción y en la práctica es un trabajo de chinos.
De entrada, para el hornillo, necesitas combustible de avión, que no te lo había contado antes, el combustible normal se congela.
Vamos que el camping gas no sirve.
Y para hacer el agua necesaria para el día y un poco de comida a parte, igual te tiras 4 horitas.
O sea,
pateas unas 10 horas en medio de un desierto de nieve lleno de sartruguis.
Sólo hay nieve, cielo, sol y tú.
Bueno y viento, casi siempre mucho viento.
Y cuando acaba el día -bueno allí el día nunca acaba-,
después de haber reventado los brancales a base de tirones,
tras montar la tienda,
-ojo con su murito de hielo y todo para que no se convierta en la casa de los 3 cerditos-,
aún tienes que sacar 4 horitas para comer algo caliente y hacer agua antes de intentar dormir con antifaz en una noche que no existe.
Nos saltamos el convenio.
Me pillas?
Es decir, que muchas veces en deporte de rendimiento, las circunstancias son tales, que lo de comer tal cual manda el libro... me río yo de Janeiro.
Por eso te repito esta frase,
"A mí lo de comer bien me hace mucha gracia. Todo el mundo quiere hacerlo y casi nadie lo consigue."
De eso va este Newsletter,
De soluciones prácticas, pragmáticas, palpables, que te llevan a ese sitio donde quieres estar, y completamente reales.
NO LAS SOLUCIONES DEL LIBRO, NO, LAS SOLUCIONES QUE SE PUEDEN IMPLEMENTAR.
Vale Juanito, pero me has puesto el ejemplo más exagerado del mundo, casi nadie vive en un congelador.
Bueno, díselo a los Rusos...
o a los Suecos
o a los Canadienses que tienen la cabeza partida en 2.
Pero no sólo eso,
Díselo al deportista olímpico con una fibrosis quística,
o al celíaco.
O al que se le atasca la bebida porque se pilló un Helicobacter Pilory que le generó una gastritis crónica.
O al que tiene el coco más blandito que la mantequilla en el desierto y no es capaz de seguir una recomendación así se le vaya la vida en ello.
O al que calma la ansiedad a base de cruasanes y bollos.
O al que come en un CAR, o le cocinan, o cocina él y puede controlar a medias.
O al futbolista que mientras juega a la Play en las concentraciones bebe Coca-cola y come gominolas.
O al que no sabe cómo.
O sabe mucho y le supera.
Etc, etc, etc...
En deporte de rendimiento ninguna situación es perfecta.
Sólo mírate al espejo, y mira alrededor.
Señoría no hay más preguntas.
Algunos de los temas de los que hablo:
› ¿Porqué 2 donuts de chocolate pueden funcionar mejor que un plato de pasta?
› Cuando el suero de las diarreas es mejor que la bebida más sofisticada
› ¿Mucho ruído y pocas nueces?
› Porqué evitar una muerte cómica con cara de gilipollas me llevó a un error de cálculo monumental
› El filete de panga, vaya cristo me montó.
› 118 alimentos diferentes a la semana
› Quiero perder grasa y ganar músculo, pero sin pasarme, que yo gano muy rápido
› Como quitarle la grasa a una sopa mientras te vigila un sargento con ametralladora y barba hasta el canalillo.
› Juan, me he vuelto a romper, ¿qué coño me pasa?
› Me duele la tripa y no me deja entrenar
› Cuando ni una dieta cetogénica funciona
› En cuestiones de alimentación el tamaño sí importa
› Respira como un elefante y mastica como una vaca
› Tengo un amigo que hace la dieta de la manzana, come de todo menos manzana. Y lo jodido es que dice que nunca se la salta.
› Joder Juan, también me ha mejorado la piel de la cara, ¿es posible?
› Enterrar comida para salvar la vida
Siento que cada vez nos entendemos mejor,
Ya sabes, morrosquito, si me quieres puedes inscribirte aquí:
Recibe gratis el boletín diario de Juan Martínez, basado en hechos reales.
PD: Aquí te vas a encontrar gente de todo tipo, pero sobretodo, mucho DES-EQUILIBRADO.
Apuntarse es gratis y salir también.
*Considerar que la alimentación deportiva no es para ti significa que te mueves menos que un abogado sin anticipo, y eso es un grave problema.
Copyright © 2023 Juan Martínez. LEGAL